Nosotros hablar, puede que no hablemos todos los días, pero como el bíblico sordomudo de Galilea al que milagrosamente sanara Jesús, miramos mucho. Y de tanto mirar hemos visto que en las últimas fechas José Luis Fernández-Quejo, el regidor municipal, ha estado de turné en las Islas Afortunadas, acompañando a un grupo de voluntarios del Belén monumental que por Navidad engalana las calles de nuestro pueblo, prestando con esta desinteresada labor un servicio impagable al desarrollo económico de nuestro municipio. Que falta hace.
A fuer de ser justos , lo que aún no podemos afirmar con rotundidad es que la turné del alcalde haya sido pagada de su propio peculio, o tal vez haya sido sufragada por los voluntarios del Belén monumental con la compensación que éstos a su vez reciben del Ayuntamiento, o acaso haya sido costeada con los 8.290.000 € de impuestos directos que a los vecinos nos cobra la Hacienda municipal, o quizás haya sido pagada con los 6.102.250 euros que en concepto de Tasas, precios públicos y otros ingresos aportamos los vecinos a las arcas municipales, o a lo mejor haya sido abonada con los 5.013.874 € que por transferencias corrientes ingresa el Ayuntamiento, o haya sido sufragada con el «aguinaldo» que para el Belén monumental recolectó el concejal de Cultura en persona, D. José Antonio Vara, entre los comerciantes y hosteleros del pueblo.
Sea como sea, el caso es que José Luis Fernández-Quejo, el corregidor municipal, ha estado recientemente de turné en las Islas Afortunadas (afortunado él, que se lo puede permitir; y desafortunados nosotros, si es que somos los que le hemos invitado a la turné), suponemos que premiando a los voluntarios del Belén y promocionando como se merecen las bondades de San Lorenzo de El Escorial entre el pueblo canario, sin duda el que más interés ha demostrado de cuantos hay en España por visitarnos, no en balde nuestras calles se ven a diario atestadas de cientos de grupos de turistas canarios que son cortésmente agasajados por nuestros comerciantes y restauradores, pues como es público y notorio el mojo picón, las papas arrugadas y el frangollo son platos que no sólo se han ganado un hueco en las cartas sino también merecida fama entre la selecta clientela de nuestros centros gastronómicos y hosteleros.